El tiempo no acompaña. Niebla y lluvia. La lluvia es necesaria y vital. Bienvenida sea.
Viajamos al municipio de Aldeadávila desde el que podemos asomarnos al río Duero y contemplar el paisaje y las panorámicas fascinantes. Te relajas, vives, disfrutas. Las aguas embalsadas por la presa del Aldeadávila y al fondo al cañón serpenteante del río fronterizo hasta que se pierde en la lejanía.
Nuestra visita obligada al mirador del Fraile, espectacular y el mejor para ver las aguas embalsadas de la presa Aldeadávila de la Ribera y el cañón del Duero.
Parece ser que esta presa es una de las más importantes realizadas en su época y la de mayor producción de energía eléctrica de España. Es impresionante con una altura de ciento cuarenta metros. Para llegar se toma como referencia el Poblado de Aldeadávila y seguir las indicaciones de la presa. Si el camino está cortado o bloqueado el acceso, sale un camino que te permite llegar al mirador en coche. ¡la carretera acojona, como acojona, de corbata!