Si un país sube sus tipos de interés, la moneda de ese país
se fortalecerá frente a las monedas de otros países, ya que los inversores invertirán
en dicha moneda para obtener un mayor rendimiento. Sin embargo, las
alzas de las tasas de interés son con frecuencia una mala noticia para los
mercados de renta variable (acciones). Algunos inversionistas retirarán sus inversiones en
acciones del país en que subió los tipos de interés, al creer que costos más
altos de endeudamiento tendrán un efecto negativo sobre el balance de las empresas cotizadas, que provocará que los títulos pierdan valor, debilitando así la divisa del país.