Monte Beo - Cabo de Santo Adrián - Malpica - A Coruña (Roteiro dos Faros nº1) |
Muy cerca de Malpica y frente a las islas Sisargas iniciamos nuestra actividad de senderismo. Al lado de capilla de San Hadrián /Adrián es el inicio del recorrido. Merece la pena parar un buen rato para disfrutar de las vistas que nos ofrece este lugar. Hay un mirador al lado de la Ermita desde el que tenemos vistas fantásticas sobre la inmensidad del Océano Atlántico, sobre las tres islas que forman las Sisargas y sobre el pueblo marinero de Malpica.Estamos en un lugar por el que pasa la primera Ruta de Os Faros, por la que transitamos mayoritariamente. Nuestro primer objetivo es llegar a la parte más alta del Monte Beo que también es vértice geodésico, pasando por la torre de tráfico marítimo y la Estación Remota de Control Marítimo Monte Beo. En poco tiempo llegamos al vértice geodésico.
Regresamos sobre nuestros en busca de la ruta de los faros. Utilizamos una senda preciosa, de fuerte pendiente y con vistas espectaculares que nos devuelve a la ruta (Cabo de San Adrián). Seguimos caminando pegados al océano por la ruta de los faros con vistas maravillosas sobre los acantilados hasta el lugar de Seixo Grande (Vuelta atrás). Volvemos sobre nuestros pasos hasta el Cabo de San Adrián para continuar sendereando pausadamente, pegados a la costa hasta llegar al punto de inicio (Ermita de San Hadrián)
Dice la leyenda que Santo Hadrián vino a Malpica para para poner fin a una plaga de serpientes que padecía la comarca. En el Cabo, mató la serpiente con un fuerte pisotón, haciendo que todas las serpientes desaparecieran.
Las islas Sisargas son un pequeño archipiélago deshabitado situado a una milla escasa del Cabo de San Adrián en Malpica. Están formadas por las islas Grande, Chica y Malante además de varios islotes. Antiguamente estuvieron pobladas como lo demuestra la existencia de la ermita de Santa Mariña, destruida por los piratas.
El faro de las islas Sisargas se ubica en la isla Sisarga Grande, y fue construido piedra a piedra entre 1911 y 1915 por los habitantes de Malpica, quienes supuestamente subían a pulso las piedras sin importarles ni el viento ni las mareas. Actualmente está automatizado y tiene una linterna marítima de 3,5 metros. Para llegar hasta él, hay que ir en barco hasta la isla, donde hay un pequeño puerto /embarcadero. Desde el embarcadero hay que caminar dos kilómetros.
Recorrido fácil por un espacio paradisíaco. Os lo recomiendo.
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