Seguimos en Cantabria, Saja Nansa. Jueves, 02 de agosto 2018
Muy próximo al pueblo de Cabezón de la Sal, a tan solo cinco kilómetros se encuentra una curiosa masa forestal que nos lleva a pensar en otro continente. En California.
Esta singular masa de árboles fue declarada Monumento Natural en el año 2003. Se trata de más de ochocientos árboles de secuoya roja o californiana. Árbol introducido en Europa en 1843.
En la época de la dictadura francisca, ante la dependencia de madera, se plantaron árboles de crecimiento rápido que facilitaran la producción industrial. La secuoya se plantó en estas tierras a partir de 1940. Fueron otras especies la que se adaptaron mejor a la producción industrial, razón por la que esta masa de secuoyas permaneciese hasta la actualidad.
Nota: El nombre de este árbol conmemora a Sequoiah, un indio cheroquee educado en Georgia, que entre los siglos XVIII al XIX inventó un alfabeto para el dialecto de su tribu.
Árboles enormes, gigantes conforman un lugar diferente para pasear entre los mismos, por distintos lugares, en familia, con amistades o simplemente de manera individual. Bonito lugar.
La entrada al bosque es de fácil acceso, por una pasarela de madera de muy poca pendiente, por lo que se puede ir acompañado de niños. Desde este punto, comenzamos el camino descendiendo por la senda peatonal que nos adentra al espacia natural de secuoyas. Por donde hay bancos para hacer un alto en el camino.
Como el recinto de esta especie es pequeño, es recomendable continuar por el resto del bosque, divisando las variedades de árboles, como las coníferas.
Si queremos realizar visitas guiadas por este monumento natural, la Oficina de Turismo de Cabezón ofrece itinerarios, que tienen como punto de encuentro el aparcamiento del bosque. Realizamos un recorrido aleatorio desde un aparcamiento habilitado para turismos y autobuses.
VER TRACK DEL RECORRIDO ( No hace falta nada para visitarlo)